Cierto, todas producen algún tipo de impacto ambiental: generando ruido, afectando visualmente o lanzando a la atmósfera metales pesados o gases de efecto invernadero. Pero es evidente, todos estamos de acuerdo, en que no todas las fuentes de energía afectan de la misma manera.

El desarrollo sostenible no es una posibilidad o una alternativa. Es una realidad, un cambio que se está produciendo de forma imparable y que deberá seguir creciendo por necesidad.

Para conseguirlo, deben desarrollarse varios campos paralelamente:

Disminuir la demanda: mejorar y optimizar el rendimiento de los dispositivos, más eficiencia.

Eliminar el consumo innecesario: con conciencia y cultura del ahorro en contra del despilfarro.

Potenciar el uso de fuentes de energía renovable: gracias al autoabastecimiento y a las fuentes limpias y sostenibles.

En relación a la reducción del consumo, en JF Ingeniería contamos con una división especializada en eficiencia energética. Y sobre el último punto, fuentes de energía limpia, somos también especialistas en instalaciones de energías renovables, una opción que cada vez es más sencilla y habitual.

Para conocer la normativa actual sobre autoconsumo de electricidad de fuentes renovables, tenemos que dirigirnos al Real Decreto 1699/2011, de 18 de noviembre, por el que se regula la conexión a red de instalaciones de producción de energía eléctrica de pequeña potencia.

Este decreto establece, en resumen, que tanto usuarios particulares como empresas pueden utilizar electricidad generada por estos medios siempre que sea para autoconsumo, es decir para alimentar las propias instalaciones.

Apostar por el autoconsumo, ya sea para nuestro hogar o negocio, tiene muchas ventajas:

Producir nuestra propia electricidad (totalmente o en parte) permite reducir la factura eléctrica.

La energía que el sol genera es limpia, gratuita, inagotable y es respetuosa con el medio ambiente.

Como parte de la política de responsabilidad social, las empresas pueden mejorar su imagen.

Uno de los principales problemas que se presentaron al inicio, el coste de compra de los sistemas, ya no es un obstáculo. Los equipos se han abaratado muchísimo desde entonces, hasta un 80% en algunos casos.

La inversión es competitiva y se rentabiliza rápidamente. Además, IDAE cuenta con algunos programas de financiación para proyectos domésticos y en empresas, aunque hay que reconocer que no se cuenta con muchos incentivos económicos por parte de las administraciones públicas.

La intermitencia en la generación de electricidad y la necesidad de sistemas de almacenamiento, el otro punto cuestionado a la hora de valorar el autoabastecimiento, quedará solventado cuando se regule por fin el sistema de suministro eléctrico con balance neto. Esto es, la posibilidad de verter a la red eléctrica el exceso producido por nuestra instalación para poder hacer uso del mismo cuando se requiera mayor demanda.

Pero aún sin tener regulado el sistema de balance neto, sigue siendo evidente que invertir en instalaciones de energías renovables y utilizar paneles solares para generar parte de la energía que consume nuestro hogar o negocio es ventajoso, ya que tiene beneficios económicos y también ecológicos, los más importantes.

Desde JF Ingeniería le ofrecemos todo tipo de servicios relacionados con el desarrollo de proyectos eléctricos de baja tensión, y somos especialistas en la gestión de licencias de apertura de locales, en energías renovables y en eficiencia energética.

Nuestros servicios van dirigidos tanto a particulares (instalaciones domésticas) como a profesionales, realizando proyectos de todo tipo en instalaciones de negocios, locales comerciales y oficinas en general.

Si lo necesitas, también tenemos a nuestra disposición colaboradores de confianza que se encargan de la ejecución y el mantenimiento de las instalaciones eléctricas que desarrollamos, agilizando la puesta en marcha de nuestros proyectos.